Los combustibles fósiles están disponibles, su capacidad para generar una gran cantidad de energía barata y confiable es alta, y son muy fáciles de almacenar y transportar. Sin embargo, a pesar de sus ventajas, los combustibles fósiles tienen serias desventajas. Cuando se queman, liberan dióxido de carbono (CO2) y dióxido de azufre, y estas liberaciones químicas en nuestra atmósfera son las principales razones detrás del calentamiento global y la lluvia ácida, respectivamente. Además, los combustibles fósiles tampoco son renovables, y se estima que el suministro de la Tierra de ellos se agotará en los próximos 40-50 años.
El cambio ambiental comienza con mejores opciones de fuente de energía
Como consecuencia de que los combustibles Farola solar LED fósiles son insostenibles a largo plazo, nuestros gobiernos y científicos están desarrollando activamente nuevas formas de extraer energía de otras fuentes (como del sol y el viento). El sol emite su energía en forma de radiación solar, que podría aprovecharse utilizando fotovoltaicos y sistemas de energía solar concentrada (para generar electricidad), así como tecnologías de calentamiento de agua solar. Las células fotovoltaicas (o células solares) pueden convertir la luz en electricidad a través de un efecto fotovoltaico. Lo que se ha encontrado es que es posible instalar este tipo de celdas en diferentes dispositivos (incluidos los cargadores de baterías solares y las luces solares) como una fuente de energía natural, sin la necesidad de confiar en la electricidad de la red o las baterías a base de productos químicos.
Las luces LED y la energía solar están liderando el camino
La invención de Thomas Edison de la muy práctica bombilla incandescente (en 1879) fue un punto de inflexión distintivo en la vida de los humanos en la tierra. Desde entonces, se han introducido varios tipos de bombillas incandescentes, pero incluso las bombillas incandescentes modernas tienen un inconveniente obvio; Son ineficientes y desperdician enormes cantidades de energía en forma de calor. Por lo tanto, ahora se están reemplazando con lámparas LED mucho más eficientes (es decir, el consumo de energía de una lámpara LED de 5 vatios es equivalente a una lámpara incandescente de 40 vatios).
Los combustibles fósiles son un riesgo de salud grave
Mencionamos CO2 antes. El hecho es que los combustibles fósiles actualmente impulsan nuestras centrales eléctricas, lo que significa que, por cada hogar que depende de la energía, se liberan grandes cantidades de CO2 en la atmósfera. En Australia, por ejemplo, por cada 1 kWh de electricidad generada, se producen 841 gramos de CO2. En los países más pobres del mundo, a menudo no tienen acceso a la electricidad, lo que hace que la situación sea aún peor para ellos, porque confían en el uso de linternas de queroseno cuando se pone el sol. Una linterna de queroseno es tenue, contaminante y tóxico. Emite 100 toneladas de CO2 al año y, si quema 4 horas al día y con el tiempo, puede causar problemas respiratorios fatales en un espacio cerrado.